¡OJO CON LOS TRASPLANTES DE ÓRGANOS!

Usted debería saber que después de recibir un órgano, algunos receptores de trasplantes sufren cambios en su carácter, en sus gustos y en sus aficiones. A veces, incluso, protagonizan recuerdos que no les pertenecen, sueños con sus donantes y otras inquietantes experiencias.
La teoría de los sistemas vivos enuncia explícitamente que cada célula viva posee una “memoria” y unos subsistemas funcionales determinantes. Por otra parte, la integración reciente del concepto de energía en la teoría de los sistemas (llamada “teoría de los sistemas de energía dinámica”) permite lógicamente llegar a la conclusión de que todos los sistemas dinámicos almacenan informaciones y energía en grados variables.
Existe cierto temor, cada día más creciente, entre los receptores y los futuros receptores de órganos ante la posibilidad de asumir características de los donantes muertos e incluso de convertirse en “cárcel” de los espíritus de quienes no estaban preparados para abandonar repentinamente su cuerpo.
Horrorizado, anda más de uno, cuando se pregunta ¿Y si nos trasplantan un órgano de un político CORRUPTO?