EL MAGO, ASTRÓLOGO Y ALQUIMISTA ALBUMASAR, BESANDO LA ETERNIDAD Y LOS UNIVERSOS PARALELOS
Son numerosas y muy válidas las aportaciones de la Armada española a lo largo de su heroica historia, destacamos en especial su participación en el campo de la investigación en esos momentos difíciles cuando la Santa Inquisición asolaba en todas las esquinas del saber y, las cátedras en las universidades se encontraban vacías, como mucho ocupadas por un clero muy limitado en estudios de ciencia y sobrado en “supersticiones” religiosas.
Imposible resultaba calcular un tiro parabólico de cañón con tres padres nuestros y dos aves marías, las matemáticas se hacen imprescindibles. Ni que decir que las naves no pueden ir de aquí para allá circundando los mares a golpe de camándula o de santo rosario, obligatorio se impone la astronomía y la física.
No nos extraña que a ciertas bibliotecas militares vayan a parar obras prohibidas para el común de los mortales y que hoy día afortunadamente para los estudiosos, entre los que me encuentro, en sus fondos bibliotecarios se hallen ejemplares de gran valor y no me refiero al simplemente monetario.
El incunable “Introductorium in astronomiam Albumasaris Albalachi : octo continens libros partiales” del Real Observatorio de la Armada consta de ocho libros sobre los siguientes temas: 1) la verdad histórica y filosófica de la validez de la astrología, 2) el número y características de la estrellas fijas y los signos zodiacales, y 3) la influencia de los siete planetas en la tierra, y 4) la naturaleza astrológica de los planetas, y 5) la relación entre los planetas y sus signos zodiacales; 6) las relaciones entre los signos zodiacales, 7) los puntos fuertes de los planetas y sus relaciones entre sí, y 8) los lotes astrológico.
Una característica notable de esta edición es la gran cantidad de grabados en madera que representan a los gráficos astrológicos, los signos del zodíaco y los planetas. Muchos de ellos son personificaciones de usos de prendas de vestir del siglo XV, probablemente como un intento de la editorial (Ratdolt Erhard en 1489) para presentar el tema de la astrología en un contexto educativo. A esto hay que sumar una clara simbología encriptada, todo el libro es una obra con doble mensaje muy propio de la época para salvaguardarse de los no iniciados.
Históricamente se le debe a la Iglesia Católica de aquel entonces, la condena de la Astrología en el mundo Occidental como un Principio de Saber, y la Edad Media y el Renacimiento fueron momentos en donde más se persiguió a la Astrología y a sus practicantes. Siglos más adelante la llamada Ciencia Moderna terminaría por buscar su aniquilación mediante un método poco científico, no escudriñando la verificación, sino buscando el desprestigio a través del chisme y el rumor. Si no fuera por los alquimistas y los astrólogos hoy no tendríamos ciencia alguna.
El astrólogo Abū Ma’shar (Albumasar) nació en Balkh (en la actualidad el norte de Afganistán), una ciudad con una larga historia de la diversidad cultural, desde el siglo III a. C. como un puesto de avanzada del helenismo vibrante a lo largo de los años de la dinastía Sasánida. Comprometido con la idea de la superioridad intelectual iraní, y confiando en las traducciones de obras científicas sasánida, Abū Ma’shar volvió a examinar la herencia intelectual persa en el contexto más amplio de las tradiciones griega e india de la filosofía natural como era común en los círculos intelectuales de Bagdad en ese momento. Se trasladó a Bagdad a principios del califato de al-Mamun (813-866), y, finalmente, ganó una reputación extraordinaria como astrólogo. Filosóficamente, Abū Ma’shar hizo suya la opinión neoplatónica emanacionista que todos los sistemas de pensamiento en última instancia, derivan de una revelación única.
La obra de Albumasar conservada en el Real Observatorio de la Armada es el más antiguo de los libros de su Biblioteca. Se trata de un ejemplar muy bien conservado en el que destacan los tipos góticos, las xilografías y las llamadas literae florentes al principio de cada párrafo. Fue editado por Erhard Ratdolt (1489), famoso impresor alemán que se dio a conocer con una imprenta instalada en Venecia. En 1486 se trasladó a Augsburgo, donde publicó numerosas obras sobre astronomía, astrología y religión. Ratdolt pasó a la historia de la imprenta por la utilización de ornamentos en las iniciales, por el uso de las xilografías y por ser el primero en utilizar una portada para un libro impreso.
Para el astrólogo Albumasar, el paso de Saturno en signos cardinales, un ciclo de 300 años, se corresponde con la inflexión política y religiosa. Sin especificar una fecha, indica Albumasar a Alejandro Magno, Jesús Cristo, Mohammed, que en realidad es a veces espaciadas aproximadamente tres siglos e incluye las Cruzadas y la conquista de Jerusalén.
Así, desde el siglo IX, Albumasar había calculado que «el año un mil setecientos ochenta y nueve sería útil en las revoluciones sociales,» por una de las grandes conjunciones de Saturno.
Predijo que cuando el conjunto de los planetas se producen en la triplicidad «de fuego», los habitantes del este someterían a fuerza de voluntad y conseguirían victorias sobre los demás habitantes de la tierra.
Dio un gran impulso a la Astrología Mundial. Creía que el mundo fue creado en el momento que los siete planetas conocidos en la antigüedad -aún se desconocían Urano, Neptuno y Plutón- estuvieron alguna vez en conjunción en el primer grado de Aries y que el mundo llegaría a su fin en el tiempo que esta misma conjunción se repitiese en el último grado de Piscis.
Como mago divide la magia, en magia natural, magia celeste y magia ceremonial. Estas tres ramas de conocimiento son llamadas también: Física, matemáticas y teología. Hay que decir que para el mago y el alquimista de esa época, estos términos no poseían la misma y única significación que le adjudicamos nosotros en la actualidad, había un algo más.
Albumasar es uno de los grandes pilares del ocultismo, fue un investigador que no buscó exclusivamente el saber erudito, sino el conocimiento vivencial. El suyo es un conocimiento directo. En un primer momento permitió avanzar a la Astronomía y ahora acercarnos a la concepción de Universos Paralelos, donde las matemáticas son una propiedad intrínseca de la naturaleza, y lo que percibimos es una versión de la realidad distorsionada por nuestros sentidos y limitaciones. La realidad existe independientemente de nosotros. El Universo no se describe con matemáticas; es “matemáticas”. Entonces si las mismas matemáticas pueden describir diferentes universos, estos serán Universos Paralelos. Esta manera de percibir la realidad en Albumasar, es consistente con la teoría de cuerdas.