JEREZ POR EL DESAGÜE

Vivimos en una época vertiginosa, y cuesta entender lo que está pasando, el tiempo se ha acelerado. Si estás en un tren dirección Sevilla o a Cádiz, vale también un autobús a Arcos o Sanlúcar, todo el mundo está mirando sus teléfonos, es el mejor momento para matar a alguien porque nadie te está haciendo el más mínimo caso.
Reír es el primer paso para dejar de creer, por esto se han sacado de la manga aquello de que la vida es un “valle de lágrimas” y venimos a padecer, naturalmente menos ellos (la religión organizada distrae). Algo que me lleva a preguntarme si el infierno no puede ser también un lugar bonito. Fuego y azufre, sí, pero oculto entre bosquecillos de placeres y buen vivir terrenal.
Los jerezanos, gente muy apañada, son dados al chisme, a contar secretos, a difamar… y dados a la doble moral. Esto se me ha pegado de una tacada y atracón. Aquí, en esta ciudad, todo el mundo es escritor hoy en día. No se necesitan conocimientos especiales, ni instrumentos ni material específico, salvo un bolígrafo de los chinos y un cuaderno. Da prestancia, eso de escribir, supone imaginación, de esto último a los jerezanos les sobra para dar y tomar un montón.

Dicen que en la plaza Esteve de Jerez de la Frontera, hay un socavón: los socavones me dan miedo, terror y espanto. Si te traga un socavón jerezano, puedes ir a parar al quinto pino o al otro lado del mundo. Al otro lado del mundo de Jerez de la Frontera se encuentra Parakai, Auckland. Esta ciudad de Nueva Zelanda es la tercera ciudad con mejor calidad de vida del mundo.
La distancia de Jerez de la Frontera a Parakai es de cerca de 20,000 kilómetros. Un viaje directo en avión tomaría alrededor de 22 horas, sin embargo, no existen rutas que cubran este trayecto. Regresar a pie lo veo muy crudo. Las antípodas de Jerez, se encuentran en las coordenadas geográficas S36°41’11.22″ E173°51’50.18″. Siempre es bueno saberlo por si te despistas saliendo de un tabanco (bar).

La antípoda jerezana está situada en la Isla Norte de Nueva Zelanda, muy próxima a Auckland, la ciudad más poblada del país oceánico. Así que ya lo sabes, si alguna vez quieres darte un paseo algo más largo de lo habitual… Parakai.
Últimamente se está convirtiendo en mí, la costumbre de concentrarme en lo que ocurre a mi espalda. Casi como si no tuviera un futuro por delante, sabiendo que estamos ya dando vueltas por el desagüe. No me acercaré a la plaza Esteve y su socavón. Usted haga lo que le pida el cuerpo. Le espera Parakai o Auckland.