La esclavitud, promovida y organizada por los europeos en el hemisferio occidental entre los siglos XVI y el XIX, no fue un hecho accidental en la historia económica moderna.
Es una pieza crucial en los primeros momentos de la formación del capitalismo mundial y del arranque de la acumulación en Gran Bretaña. Entre mediados del siglo XVI y la abolición en 1888 del tráfico en Brasil, más de 14 millones de personas, principalmente de África Occidental y el Golfo de Guinea, fueron arrancadas de sus comunidades de origen para ser deportadas a las colonias europeas de América. El «ganado negro» permitió impulsar lo que se llama la primera agricultura de exportación: la economía de plantación.
Inglaterra es la nación que mas lleva esclavos de África a América. España entra verdaderamente en la trata cuando Inglaterra la prohíbe.
España y Portugal mantienen el monopolio durante cien años. Los anglosajones tenían una voluntad clara de sacar productividad, para los españoles no era su negocio ya que les dejaba poco dinero en relación a lo que les producían las minas. Los asientos (permisos) no lo hacían físicamente gente española, normalmente eran ingleses, holandeses. Eso sí, por cada negro que transportaban a las colonias americanas, el rey cobraba una suculenta parte. Era materia prima barata que se vendía muy cara, la relación riesgo beneficio resultaba excelente.
Sin las riquezas de América, sin los esclavos negros y el comercio africano, el despegue económico, político y militar de los Estados europeos, especialmente de Gran Bretaña, hubiese quedado limitado a una escala menor; quizás definitivamente muy menor.
Los primeros esclavos negros llegaron América, a finales del siglo XV, llevando varias decenas hasta el 1518, fecha en la que la corona dio la primera licencia para introducir a 4000 africanos en las indias durante 8 años, este fue el primer asiento de negros que durante mucho tiempo fue una fuente lucrativa y ensangrentada para los europeos. Además del negocio oficial, también existió paralelamente el ejercido por piratas y traficantes humanos de estraperlo.
El negocio triangular, empezaba cargando en Europa telas, ron, tabaco y armas que cambiaban por esclavos en África, para luego venderlos en América, de donde regresaban con materias primas y minerales a Europa.
Siempre hay que pensar la esclavitud en términos económicos. La utilidad del esclavo era que produjera dinero, si no se le ponía a trabajar arruinaba ya que consumía.
La esclavitud es considerada en la sociedad española, como tal, hasta tiempos vergonzosamente muy recientes. Un comercio de seres humanos apoyado por los más poderosos liberales de la época.