La novela en clave, en la que cualquier parecido con la realidad no es coincidencia, es la manera menos ortodoxa de zambullirse en el presente. No se encuentra nada en ella que no exista, no hay ausencia de la banalización del dolor, la tortura, la muerte, la maldad, la violencia, ante la pasividad del participante en rituales de la LOGIA Sherrygate’s Jerez.
(En proceso de creación, se está cociendo)